Debido a la situación económica actual con relación al constante desequilibrio entre los ingresos y el costo de la vida, se ha contemplado la necesidad de incursionar en el campo de la investigación y desarrollo de ciertos productos, tecnologías y servicios que proporcionan satisfactores a consumidores cada día más conscientes de adquirir bienes y servicios útiles a un costo razonable. Pensando en lo anterior, cabe señalar que un profesionista, sobre todo de tipo ingeniero, con inquietudes de llegar más allá de una simple subsistencia momentánea, cuenta con un potencial por demás extenso para emprender labores de investigación y desarrollo en diversas áreas, con lo cual no solamente podría incrementar sus probabilidades de éxito profesional con su consiguiente holgura económica, sino que además, se encontraría contribuyendo al fortalecimiento de la estructura económica, tecnológica, comercial y de servicios del país.