El presente trabajo realiza un análisis sobre el neoconservadurismo y su capacidad de materializarse e influenciar mediante la política exterior americana. Por ende el neoconservadurismo se convierte en el hilo conductor de la investigación, el cual tiene como propósito analizar la influencia del mismo en el distanciamiento y rivalidad de la Federación Rusa y los EE. UU. durante la administración de George W. Bush. Se escogió a la Federación Rusa como caso de estudio por el carácter polémico de sus relaciones internacionales con respecto a Estados Unidos en los últimos arios. A casi 20 años de su nacimiento, la Federación Rusa hoy transformada y con mayor fuerza, se convierte en un escenario interesante para reconocer el alcance del neoconservadurismo introducido por Washington. Rusia emana de una Unión Soviética fragmentada y vencida por la Guerra Fría, por lo cual desde principios de los años noventa busca adoptar un modelo estatal que le permita posicionarse en el mundo. Es aquí donde el neoconservadurismo interviene, e intenta conducir las acciones del país. La principal motivación es descubrir qué tanto poder y capacidad de influencia tiene el neoconservadurismo, y qué tanto se amolda a la realidad del Kremlin.